Salud mental
La felicidad perjudica seriamente la salud mental

Con el auge de la salud mental, en los últimos tiempos están proliferando influencers sentimentales que difunden una forma de psicología de autoayuda, basada en tips generalistas orientados a la búsqueda de esa supuesta felicidad profundamente individualista, neoliberal y meritocrática.
Juventud -SALUD MENTAL
Una chica sentada en un banco en Leganés. Álvaro Minguito
10 oct 2022 11:09

Seguro que has oído hablar de ella. Seguramente conocerás a alguien que ha leído su best seller de las ‘personas vitamina’, o a quien le encanten sus conferencias. Su podcast está en el ranking de los más escuchados de España. Es la consejera emocional preferida por diferentes cadenas de televisión y radio. Y un verdadero riesgo para quienes consumen sus píldoras psicológicas buscando la felicidad.

Marián Rojas Estapé, que estudió psiquiatría como su padre, acostumbra a dar charlas divulgativas en las que difunde frases de este tipo: “la felicidad está íntimamente relacionada con el sentido que le damos a nuestra vida. No es lo que te pasa en la vida, sino cómo te lo tomas”. Al parecer, para la señora Rojas, el contexto social y las circunstancias materiales que nos rodean no tienen ningún peso en nuestra condición anímica.

“Las mujeres nos exigimos demasiado”, afirma también esta psiquiatra, “para nosotras todo tiene una carga emocional. Porque las mujeres somos así”. Ellos, en cambio, “tienen la suerte de ser mucho más simples, olvidadizos, y con una enorme capacidad para desconectar y no complicarse la vida”. Un discurso peligrosamente esencialista, en el que reproduce y naturaliza los estereotipos de género sin tener en cuenta la socialización patriarcal.

Culturas
El negocio de la felicidad, el fraude del siglo XXI
La felicidad es el ‘trending topic’ del siglo XXI. Se ha convertido en una de las construcciones culturales con mayor influencia sobre la vida diaria de millones de personas y coincide con la agenda neoliberal.

Con el auge de la salud mental, en los últimos tiempos están proliferando influencers sentimentales que difunden una forma de psicología de autoayuda, basada en tips generalistas orientados a la búsqueda de esa supuesta felicidad profundamente individualista, neoliberal y meritocrática. Una felicidad basada en perseguir sueños y éxito profesional: “los triunfadores son aquellos que disfrutan en su trabajo”, es otro de sus lemas. Que se lo cuenten a las Kellys, las camareras de piso que trabajan a destajo en los hoteles.

Estas frases culpabilizan a quien no es feliz y le hacen sentir responsable único de lo que le pasa porque no se esfuerza lo suficiente.

El sufrimiento psíquico tiene un origen sistémico

Este tipo de consignas fundamentan un modelo de atención psicológica alejado de la realidad social porque no tiene en cuenta el contexto que rodea a cada persona. Como si todas partiéramos del mismo lugar y como si los malestares no fueran profundamente políticos y estructurales en demasiadas ocasiones. Son terapias que pueden servir de ayuda a corto plazo, calmar la sintomatología y resultar muy atractivas para el público, pero que no dejan de ser un parche que no va a la raíz del problema y, por tanto, no transforman. Porque, lo cierto es que la mayoría de las causas que nos provocan ansiedad, estrés o tristeza son de carácter social.

El punto de partida que condiciona nuestra salud mental está marcado por el distrito postal en el que uno nace, por el neoliberalismo y el patriarcado

Existen, por supuesto, particularidades, biografías traumáticas e infancias difíciles que hay que escuchar, validar y reparar. Pero el punto de partida que condiciona nuestra salud mental está marcado por el distrito postal en el que uno nace, por el neoliberalismo y el patriarcado. Qué casualidad que sean las mujeres y las personas de entornos más desfavorecidos las que consumen más benzodiacepinas. Además de que las mujeres y los pobres son mucho más patologizables.

Que un gran número de las personas a las que acompaño profesionalmente se encuentren agotadas, deprimidas o tomando medicación, es ante todo un problema de carácter social y colectivo. Que la mayoría de las mujeres que escucho no estén a gusto con su cuerpo, odien mirarse al espejo y tengan problemas con la comida, es un problema profundamente estructural y patriarcal. Que se sientan poco sexuales, que se quejen de que no disfrutan de su sexualidad o de tener relaciones para complacer a sus parejas, es un problema político. Que muchos hombres se sientan perdidos con respecto a su masculinidad y lo que se espera de ellos, que recurran a la violencia o al silencio como forma de ejercer el poder, o que violen o maten, no son problemas individuales ni casos aislados. Que el suicidio sea la primera causa de muerte no natural entre los jóvenes está relacionado con el precario horizonte que les ofrece el sistema.

Tras muchos años acompañando el sufrimiento humano he aprendido a aceptar los límites de mi profesión porque hay determinados malestares sistémicos que no voy a poder calmar.

¿Qué puede aportar la terapia a las personas que, tras interminables jornadas de trabajo, no llegan a fin de mes? ¿Cabe hacer con ellas un proceso de individuación cuando no pueden acceder a una vivienda? ¿Tiene sentido hablarles de amor propio y autonomía personal? ¿De qué sirve la medicación, más allá de aliviar síntomas, cuando vives en un sistema tan violento, desigual y opresor?

Ante un sistema enfermo lo lógico es tener ansiedad

En un sistema tan injusto, que genera desigualdad, precariedad, competitividad laboral, violencia contra nuestros cuerpos o dificultad para acceder a una vivienda, y ante un panorama incierto y un planeta en grave crisis, lo lógico es no adaptarse, tener ansiedad, miedo y deprimirse. Y por eso, conviene dejar de entender las crisis como un peligro, resignificar los síntomas y aliarnos con ellos porque nos informan de que algo no va bien en nuestra sociedad.

Es imprescindible que desde la psicología tengamos una mirada política y, desde ahí, entendamos los malestares y los colectivicemos. La mirada política, es decir, feminista, de raza y de clase posibilita visibilizar, entender y atender los malestares sin aislarlos de las opresiones sociales de las que brotan.

La terapia como espacio para la rebeldía y la acción

Vivimos un auge de la terapia. Todo el que puede va a terapia: políticos y famosos hablan de su terapeuta con la misma naturalidad que Woody Allen. Sin duda es un recurso de gran ayuda que tiene que ser más accesible y menos privado. Pero suponer que es la respuesta a todos nuestros problemas resulta peligroso.

No tengo muy claro en qué consiste la felicidad ni cuáles son sus claves, si es que existen. Pero identificar la felicidad con el éxito profesional y social me parece algo tan pueril como excluyente

Lo que sí es indispensable es que la terapia, además de una relación de sanación, sea un espacio profundamente político. Un espacio terapéutico que anime a colectivizarse. Que provoque la duda, la crítica y la reflexión en común. Que cuestione el sistema y los valores predominantes, el modelo de éxito, de productividad y la cultura del sobreesfuerzo. Que incite a la rebeldía y la insumisión. Que nos dé herramientas para plantarnos ante quienes nos explotan, ante nuestros jefes, para hacernos valer y negociar mejores condiciones laborales. Una terapia que no ponga el foco en los logros, que nos recuerde que el trabajo no es nuestra vida, y nos ayude a validarnos más allá de lo que conseguimos. Porque ni nuestro trabajo ni nuestra productividad nos definen.

Desde mi espacio terapéutico me niego a ser cómplice de la patologización y medicalización de los malestares estructurales y calmar la ansiedad y el sufrimiento de la gente a base de acallar sus quejas, favorecer su sometimiento y enmascarar los determinantes sociales.

No tengo muy claro en qué consiste la felicidad ni cuáles son sus claves, si es que existen. Pero identificar la felicidad con el éxito profesional y social me parece algo tan pueril como excluyente y de lo que estoy segura es de que una mejor redistribución de la riqueza y un acceso universal a una atención psicológica pública de calidad podrían mejorar mucho la vida de la gente.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Argentina
Extrema derecha La motosierra de Milei se ceba con los hospitales públicos y las personas con discapacidad
Los recortes del Gobierno afectan al Hospital Garrahan, un centro de alta complejidad, referente pediátrico nacional y latinoamericano, y también a los recursos de las personas con discapacidad, a los que el ejecutivo califica de “idiotas”.
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Un centro de salud desbordado y con cucarachas y otro pendiente de construir desde hace 22 años
Los vecinos del barrio de Comillas, en Carabanchel Bajo, se han manifestado para reclamar el nuevo centro de salud planificado desde 2003 y cuya parcela ya fue cedida por el Ayuntamiento a la CAM, que no da explicaciones por la paralización.
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid El Juzgado de Leganés suspende las declaraciones de ex altos cargos del Gobierno Ayuso por el Caso Residencias
De esta manera se inhibe en favor del Juzgado de Instrucción número 3 de Madrid, aceptando así la petición realizada por uno de los investigados, Francisco Javier Martínez Peromingo.
Burundi
14/10/2022 13:17

"No tengo muy claro en qué consiste la felicidad ni cuáles son sus claves, si es que existen. Pero identificar la felicidad con el éxito profesional y social me parece algo tan pueril como excluyente". Me pregunto si puedes ser feliz sin el éxito social y profesional. Es decir, ser feliz sin tener un trabajo y sin tener buenas relaciones sociales...

0
0
oscar.f
13/10/2022 22:49

Sin disentir del fondo del artículo, creo que se comenten errores de interpretación que favorecen la rabia (útil para estimular el inicio de nuevos caminos, destructora para guiarnos).
Da la impresión que solo las clases populares necesitan salud mental, ¿acaso no se deprimen las personas ricas, las clases altas?. Puede dar la impresión, leyendo el artículo, que solo siendo precario, viviendo en condiciones pésimas se puede perjudicar tu salud mental. ¿Con las necesidades básicas cubiertas no sería necesaria la salud mental?
Más allá de eslóganes y frases motivadoras, sí creo que la salud mental tiene que ver con el sentido de la vida, sí tiene que ver con cómo nos miramos, con cómo nos tratamos a nototr@s mism@s, qué nos exigimos, qué valoramos, a qué aspiramos…
Denunciar que la psicología capitalista solo mira la forma y te “ayudará” con eslóganes motivadores y medicamentos “adormecedores” y proponer una psicología humanista que nos aliente a respondernos qué quiero, por qué lo quiero para qué lo quiero, hacia dónde voy, qué hago aquí, es necesario remarcarlo. Como remarcar que si no sé si mañana tendré para poder comer es un problema social con repercusiones psicológicas.
Alertar del peligro de la psicología individualista, con eslóganes motivadores y medicamentos “adormecedores”, donde el fin es saber usar a las demás personas, y marcar la necesidad de una psicología universalista, en donde se entienda al ser humano como ser histórico y social cuyo modo de acción transforma el mundo y su propia naturaleza.
Creo que no podemos negar la búsqueda de la felicidad a nadie, pero sí alertar de la falsedad de las “recetas rápidas”. Igual que no se aprende a montar en bici viendo videos de Perico Delgado, no se busca la felicidad dejando de ser conscientes de nuestra vida. Y tampoco nadie aprendió a montar en bici sin una bici, (prestada, heredada, comprada…) y alguien que te sujetara, animara y diera indicaciones.

0
0
MARIELA
12/10/2022 12:11

Gracias por el artículo!! El pensamiento positivo fue para mi una gran ayuda, pero creó que se ha convertido en la herramienta del capitalismo para autoinculparnos de nuestras tristezas.

0
0
LIBERTAD, VERDAD, DEMOCRACIA
10/10/2022 16:04

Comentario 2º.-

Y sí, la felicidad perjudica seriamente la salud, es decir, que seguir todas esas estupideces, simplezas cuasioligofrénicas, falacias, sinsentidos, etc. perjudica seriamente la salud, pero no solo de aquellos que siguen esas recomendaciones, dogmas o autos de fe, si no que también perjudica la salud de los demás -(en menor medida, en general, que la de los que sigan aquello)-. Imagínate que tienes un jefe en tu trabajo o cualquier otra persona -(familiar, pareja, etc.)- que es tan imbécil como para seguir a esos coachings -(o incluso presuntos profesionales)-, pues ya vas listo porque toda esa porquería te salpicará pero bien: no hay tonto bueno y un tonto hace ciento.

0
0
LIBERTAD, VERDAD, DEMOCRACIA
10/10/2022 15:49

Aquí con este asunto de los coachings sentimentales, psicológicos, etc. resulta muy muy fácil hacer humor y inclusive humor negro. Basta con coger cualquier frase y poco más. Dicen que "las personas felices con las que disfrutan con su trabajo"; lo cual no quiere decir que todas las personas disfruten con su trabajo; más bien seguramente que más del 90 % de los currantes sufren su trabajo como una esclavitud o unos granos gordos en el culo.

Lo lógico de un sistema criminal no es tener malestar y patologías de todo tipo -(a cual más mala y mortal)-, si no coger y tratar de salirse de ese sistema criminal. Es como si a alguien que está metido en Auschwitz le dicen "tú tranquilo que no es que esté loco, porque es lógico que tu salud cada minuto que pasa es más precaria y tus enfermedades va en aumento; esto es lógico, etc., etc.".

En fin.

0
0
Desastres ambientales
Crisis climática El negocio de la catástrofe en zonas azotadas por fenómenos extremos
Las entidades suben precios a la vez que intentan lavar su imagen presentándose como “sostenibles”. Mientras, muchas de ellas siguen invirtiendo miles de millones en industrias como el petróleo o el carbón.
Mallorca
Llucmajor Imágenes inéditas de la macrogranja de Mallorca ratifican las malas condiciones de las gallinas
El vídeo difundido este martes confirma el pésimo estado de la explotación, con gallinas enfermas, telarañas o huevos arrugados. Un juzgado de Palma ha abierto diligencias contra la granja por presunto maltrato animal.
Opinión
Opinión Pedro Sánchez, final de partida
El presidente del Gobierno se irá sin haber hecho nada para evitar que el circuito que ya estaba ahí cuando llegó siga funcionando.
Opinión
CEOE Los corruptores condenan la corrupción
Desde la CEOE, lobby de los grandes empresarios implicados en tramas de corrupción durante décadas, han criticado a los políticos que han formado parte de dicha corrupción.
Oriente Próximo
Oriente Próximo Israel pone la región al borde del abismo
La región vive una escalada de la tensión tras el ataque de Israel a Irán y la respuesta de este. El intercambio de ataques no ha cesado en todo el fin de semana.
Opinión
Opinión La Argentina de Milei: la nueva derecha avanza motosierra en mano
La prensa de derecha ensalza los éxitos económicos del Gobierno de Javier Milei, sin contemplar las consecuencias sociales ni las resistencias que está provocando.
Alicante
Alacant Martín Villa y el expolicía Daniel Aroca irán a juicio por un asesinato político durante la transición
El exministro y empresario será investigado por crímenes contra la humanidad cometidos durante la dictadura franquista. Se trata del primer caso de estas características dirigido desde un juzgado español.

Últimas

Baleares
Un modelo insostenible El rechazo a la turistificación se expande en Canarias, Baleares y Barcelona
Tras la masiva manifestación en las Islas Canarias del pasado mayo, Palma de Mallorca, Barcelona y San Sebastián salen este 15 de junio a la calle contra un modelo de turismo desmedido insostenible para el territorio y sus habitantes.
Oriente Medio
Oriente Medio Decenas de muertos en una noche de sirenas y misiles cruzados entre Israel e Irán
Después del ataque israelí contra la infraestructura energética y militar iraní, cientos de misiles iraníes atraviesan el cielo israelí e impactan en Tel Aviv, Bat Yam, Tamra y Haifa.
Opinión
Opinión Amor, alienación y nostalgia en la obra de Wong Kar Wai
El cine de Wong Kar Wai logró captar la avalancha de nostalgia que florecía en el capitalismo tardío frente a la desorientación y la enajenación de los propios sujetos sociales.
Crónica
Justicia En la sala de un juicio a una madre protectora
Esta es una crónica de un juicio a una mujer que pidió medidas por sospechar de abusos sexuales a su hija en el domicilio paterno sin que ninguna institución moviera un dedo y, un mes después, cogió un vuelo a su país para intentar protegerla.
Editorial
Editorial Justicia irracional
Por acción o por omisión, las instituciones violentan a las mujeres. Se llama violencia institucional.

Recomendadas

Consumo
David Sánchez “Shein está diseñado para crear adicción a través de patrones muy oscuros”
David Sánchez Carpio es director de la Federación de Consumidores y Usuarios (CECU), una de las organizaciones que han denunciado al gigante chino de venta de ropa por internet ante la Comisión Europea. “No hay que culpabilizar a los consumidores".
Violencia machista
El Estado que revictimiza Violencia institucional: “Si lo hubiera sabido antes, no hubiera denunciado nunca”
Rocío ha sufrido violencia psicológica, física y sexual por parte de su expareja. Y también violencia institucional en todas las puertas de la red de recursos institucionales que ha ido atravesando.
Galicia
Galicia Activistas bloquean una planta de Altri en Portugal y avisan de que frenarán su expansión en Galicia
El grupo atrancó con cadenas y soldadura las entradas de la planta de Celbi en Leirosa, en la mayor acción directa hasta el momento contra la expansión de la multinacional papelera en territorio gallego: “O povo é quem para Altri”.
Rap
Los Chikos del Maíz “La música urbana está llena de fachas y votantes de Vox”
Tras un fin de gira accidentado, Toni y Nega dan una tregua indefinida a su proyecto con dos conciertos en Madrid. Horas antes de llenar la sala en la primera cita, visitan la redacción de El Salto.