Residuos
Damm pinta sus latas de verde

A raíz del lanzamiento del nuevo anuncio de Damm, el autor reflexiona sobre la responsabilidad de esta empresa en la generación de residuos y carga contra su negativa a la implantación en Catalunya de un sistema de retorno de envases, cuestionando una campaña comercial que considera un mecanismo de lavado de imagen ecológico por parte de la corporación.

Anuncio de Estrella Damm
Fotograma del anuncio "Acto I. Alma" de Estrella Damm.
La Directa
2 jul 2019 11:24

“Acto I. Alma”. Una joven baila hipnóticamente entre las azules y cristalinas aguas mediterráneas. Rocas y posidonias la acompañan. De repente, un rictus de miedo la invade. Plásticos y contaminación la rodean. La joven parece ahogarse y cae al fondo del mar. Un clamor: “Si queremos mantener nuestra forma de vivir, ¿no deberíamos proteger lo que la hace posible? Mediterráneamente”. Nuestra esencia, la mediterraneidad, nos pide que dejemos de contaminarla. Lo firma Damm, ¿quién si no? Twitter está llena de lágrimas emocionadas agradeciendo a Damm que tome conciencia de la magnitud del problema de la contaminación y ayude a difundirlo entre la población. Supongo que el anuncio pasará a los anales de la publicidad catalana y ayudará a ligar la lucha contra la contaminación marina a los valores corporativos de la empresa. Todo bien. ¿Todo bien? Hacemos un salto en el tiempo.

Año 1970, en el punto culminante de la contracultura norteamericana, y partiendo de la inspiración del movimiento contra la guerra, el 22 de abril se celebra el primer Día de la Tierra. Millones de personas en EE UU participan en manifestaciones y actividades de reivindicación del derecho a un entorno saludable. Grupos que luchaban contra la polución industrial, la construcción de autopistas, centrales energéticas... compartieron una fecha que les permitía visibilizar las diferentes luchas de una causa común.

En 1971, un anuncio revolucionó Estados Unidos: la esencia de América original apelaba a los norteamericanos modernos a que dejaran de contaminarla

El mismo día, un año después, un anuncio revolucionó Estados Unidos. Iron Eyes Cody, un indio americano, navega río abajo con una canoa. Gradualmente desaparecen los árboles que rodean el río y aparecen desechos flotantes. El indio desembarca en el cauce, ahora convertido en una zona industrial llena de vasos y envases de plástico abandonados. El indio camina. Llega a una autopista y, desde un coche, alguien le tira una bolsa de basura a los pies que se abre y esparce desechos. Un primer plano nos muestra la cara del indio que se gira para mirarnos y adivinamos que una lágrima le cae por la mejilla. El clamor: “La contaminación la empiezan las personas. Las personas pueden detenerla”. La esencia de la América original apelando a los norteamericanos modernos que dejen de contaminarla. ¿Os suena?

El anuncio lo hizo Keep America Beautiful (KAB), una asociación sin ánimo de lucro fundada en 1953 para luchar contra el abandono de residuos en los espacios naturales, y se considera un clásico de la publicidad. También se considera una obra maestra del lavado de imagen verde o ecológico, es decir, greenwashing, ya que detrás de KAB hay empresas como Philip Morris —gigante de la industria del tabaco—, The Dow Chemical Company and DuPont —gigante químico con intereses en el sector del plástico— o PepsiCo y Coca-Cola, principales envasadoras de refrescos. Tabaco, plástico y latas de bebidas. Tres de los principales componentes de los residuos que contaminan el entorno, empezando por las calles y las plazas, y terminando por las playas y el mar.

De hecho, KAB nació en 1953 como respuesta a la ley que prohibía la venta de cerveza en envase no reutilizable en el Estado de Vermont, medida destinada a evitar el abandono de latas. En cuatro años, la ley fue derogada por presiones de la industria. Como alternativa, en 1972, Vermont aprobaba una de las primeras leyes mundiales que obligaban al establecimiento de un depósito sobre los envases de un solo uso para garantizar su retorno al punto de venta y su posterior reciclaje.

Un gigante industrial, responsable de la puesta en el mercado de millones de envases de un solo uso de latas de cerveza que —mediterráneamente— también terminan abandonadas en el mar, centrifuga sus responsabilidades y las colectiviza 

Cincuenta años más tarde, la historia se repite. La sociedad civil, científicos y ecologistas ponen sobre la mesa una evidencia: la creciente contaminación marina por el plástico. Un gigante industrial, responsable de la puesta en el mercado de millones de envases de un solo uso, de latas de cerveza que —mediterráneamente— acaban abandonadas a decenas de miles en las calles, parques, plazas y también en el mar, centrifuga las sus responsabilidades y las colectiviza: “La contaminación la empiezan las personas. Las personas pueden detenerla”.

Al mismo tiempo, capitaliza los nuevos valores colectivos y los hace parte de su marca. El manual de lavado de imagen verde sigue funcionando tan bien como el primer día. Nada nuevo. Damm forma parte de Ecoembes, el lobby del envase de un solo uso que se ha opuesto desde hace diez años a la implantación de un sistema de depósito para evitar que latas, botellas de plástico y briks ensucien nuestro entorno.

Propuesta de acto II. Desalmados. Cada día se ponen en el mercado millones de envases de un solo uso. Una buena parte termina tirada en cualquier lugar. Varias voces piden la implantación en Catalunya de un sistema de retorno de envases como el que hace más de 40 años existe en muchos lugares del mundo. Damm, junto con empresas representativas de Ecoembes como Coca-Cola, grandes supermercados, Freixenet y otros, pide una reunión al consejero Santi Vila. El consejero, en su despacho, ve como van entrando los principales representantes del sector alimentario. Uno a uno le preguntan si se ha vuelto loco. ¿Cómo se atreve promover la implantación de un sistema de depósito en Catalunya? ¿Cuánto costará? Ellos no son responsables, es el ciudadano quien tira los envases. La nuez del consejero sube y baja con cada nueva intervención. La escena se cierra con la mano del consejero guardando en un cajón la propuesta de ley.

El mercado quiere que consumir sea un derecho, por lo menos en el norte global. Consumir todo. En todo momento y en cualquier lugar. Y si consumir es un derecho, la responsabilidad del impacto ambiental de este consumo es individual. “La contaminación la empiezan las personas. Las personas pueden detenerla”. Por cierto, a pesar de negarlo toda su vida, Iron Eyes Cody no era indio. Era hijo de inmigrantes sicilianos. Mediterráneamente.

la directa
Texto publicado originalmente en catalán en La Directa.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Italia
Enfoques Biocidio: la larga lucha contra la catástrofe ambiental en la Tierra de los Fuegos
Durante tres décadas, empresas, particulares y organizaciones criminales, con el beneplácito del Estado italiano, convirtieron esta región ubicada en Campania en una de las más contaminadas de Europa.
Ayuntamiento de Madrid
Madrid Vecinos del barrio La Paz bloquean parte de la M-30 en protesta contra el cantón de limpieza
‪Unas 300 vecinas y vecinos el barrio se han manifestado contra el inicio de las obras previsto para este martes y defienden: “No al cantón debajo de mi balcón”.
#36578
4/7/2019 10:13

Un fantástico artículo, el capitalismo del greenwashing (coche eléctrico, nucleares... Mediante) en su apogeo. Ya tenemos nueva fase el ecofacismo de los ricos. Pero el enemigo siempre es el otro, el inmigrante, el pobre, el que consume y contamina

0
0
#36553
3/7/2019 5:02

Sin tanta rimbombancia y adjetivos el artículo habría estado el doble de bien y, tal vez habría sido la mitad de corto. Quizá ese fue el problema, que se hizo un artículo para decir que Estrella Damm pertenece a Ecoembes -y dibujar una situación imaginada por quien escribe. Menos marketing y más PERIODISMO, por favor.

1
3
#36579
4/7/2019 10:18

Te parece un texto largo y rimbombante, o eres un troll que comienza a haberlos por los comentarios de el salto, o no tienes muchas luces

0
0
Corrupción
Corrupción El juez decreta prisión provisional sin fianza para Santos Cerdán
El juez acepta la propuesta del fiscal y decreta cárcel contra el ex secretario de organización socialista por integración en organización criminal, cohecho y tráfico de influencias.
València
València La Audiencia de Valencia confirma la imputación a Argüeso en el juicio de la dana
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial concluye que la resolución de la instructora “no es irrazonable ni arbitraria”, ratificando la imputación del ex secretario autonómico de Emergencias.
Opinión
Opinión Feminismo de clase y lucha por la hegemonía cultural
Muchos espacios feministas suelen incorporar códigos simbólicos y culturales burgueses que deslegitiman a los de la clase obrera. Aparte de las condiciones materiales, es necesario abordar la hegemonía cultural que estructura esta exclusión.
Análisis
Análisis Negar, polarizar, avanzar: el asalto de la ultraderecha a las políticas climáticas
El llamado Pacto Verde Europeo se ha convertido en el principal caballo de batalla de la guerra cultural del negacionismo climático, sobre el que anudar los diferentes discursos negacionistas de la extrema derecha.
Historia
Historia ‘Weimar’, y su eco
‘Tiempos inciertos’, la exposición dedicada a la República de Weimar en el CaixaForum de Barcelona, apenas se deja nada, pero vuelve a incurrir en la idea de las “dos Alemanias” contrapuestas.
Sevilla
Cumbre de la ONU en Sevilla Cumbre de la ONU en Sevilla: sin EEUU, sin hablar de Palestina y con poca ambición según las ONG
Más de 150 representantes internacionales debatirán en la Cumbre de la ONU hasta el 3 de julio con el objetivo de firmar el Compromiso de Sevilla, un acuerdo “hipócrita y poco ambicioso”, según las organizaciones sociales

Últimas

Barcelona
Derecho a la vivienda Amenazas de violencia extrema y una paliza a los habitantes de un bloque okupado de Barcelona
El Salto accede a las llamadas y mensajes de audio amenazadores que un grupo de desokupa envía al vecindario del bloque Llenguadoc, donde confirma cumplir con el mandato del propietario del edificio.
El Salto Radio
El Salto Radio Peinando canas 3: ¡Vamos al cine!
En el tercer capítulo de esta serie dedicada al colectivo sénior destacamos el trabajo de El Parlante, entidad organizadora del festival La Gran Pantalla.
Palestina
Palestina 72 personas asesinadas en Gaza en las últimas horas
Los ataques se han intensificado en el norte del enclave y la población continúa siendo atacada por el ejército israelí en los puestos de distribución de comida de la Fundación Humanitaria Gaza.
Más noticias
Palestina
Tribuna Tres o cuatro días sin comer en Gaza
El drama de no poder dar suficiente comida a tus hijos es inmenso, sobre todo cuando sabes que a pocos kilómetros hay camiones llenos de ayuda. Parados. Bloqueados.
Gobierno de coalición
Gobierno de coalición La fuga de más diputados de Sumar, en manos de Sánchez
Más representantes de las confluencias aguardan a la comparecencia del presidente del Gobierno del 9 de julio como la última señal para no saltar al grupo Mixto.

Recomendadas

Economía social y solidaria
Historia Lo que Franco arrebató al cooperativismo y a la economía social y solidaria
La dictadura franquista combatió de forma cruel el movimiento cooperativo fraguado en la II República, y durante la propia guerra con las denominadas colectividades, y pervirtió la idea de autogestión a través de los ideales falangistas.
Río Arriba
Río Arriba Yayo Herrero: “El holocausto nazi no es una excepcionalidad en la historia de Europa, es un modus operandi”
Nueva entrevista de Río Arriba en formato podcast y vídeo en el que hablamos de ecofeminismo, transiciones ecosociales justas, decrecimiento, colapso, poner la vida en el centro y mucho más.
En el margen
Cécile C. Eveng “Perdemos amigues y es una pena porque las personas LGTBIQ pueden ayudar a desarrollar África”
La filóloga camerunesa reside actualmente en España y estudia un doctorado en migraciones, cuerpos, negrofobia y vulnerabilidad de personas. Investigar sobre identidades disidentes en su país le ha traído críticas, hasta desde la propia academia.