Desigualdad
Los olvidados

El 1% más rico del planeta ya tiene tanto como el otro 99%.

Olvidados
SOCIÓLOGO EN CIERNES. COLUMNISTA Y COORDINADOR EN NUEVA REVOLUCIÓN.
30 nov 2017 00:57

En la zona este de la capital peruana un muro de hormigón y concertinas de apenas 10 km separa a los más pobres de Lima del resto de habitantes de la ciudad. A un lado la realidad de un país latinoamericano que ha sacado de la pobreza a 7 millones de personas en 5 años, un país que ha logrado proporcionar a gran parte de sus habitantes servicios con los que nunca habrían soñado, al otro lado los olvidados, para quienes las inversiones extranjeras y  la bonanza de la élite comercial de Perú no tiene apenas reflejo en sus vidas. Los habitantes de San Juan de Miraflores no saben nada de las supuestas bondades del liberalismo, el programa de ajuste estructural que el Banco Mundial aplicó en los años 90 en Perú para liberalizar su economía jamás contó con los desheredados del país, aquellos que se esconden tras el muro.

Entre el populoso pulso de Villa María del Triunfo y la exclusiva bonanza de La Molina se interpone algo más que un pequeño muro, pese a lograr reducir el índice de pobreza en más del 50% en apenas una década y a beneficiarse con la apertura de su mercados de los precios récord de la exportación de sus minerales, Perú no ha logrado estructurar un crecimiento igualitario para el conjunto de su población. Los muros que hoy separan los elitistas barrios de la capital de las villas miseria son el dibujo físico de una delimitación social que se moverá con el paso del tiempo según los flujos económicos globales. El muro de la vergüenza supone hoy una realidad para los que se encuentran atrapados en su interior, pero también una amenaza directa para esas capas sociales limítrofes con la miseria que ven como sobre ellos comienzan a centrarse los primeros sacrificios de una economía que a todas luces se está desacelerando.

Todo tiene un precio incluso el derecho a disfrutar del espacio en nuestras ciudades

10 años de disciplina fiscal y estabilidad en términos macroeconómicos no han evitado el riesgo de la vuelta a la inestabilidad para grandes capas de la población trabajadora. Al mismo tiempo que los escándalos de corrupción siguen apareciendo en la clase política peruana, las medidas de austeridad amenazan seriamente con comprometer los hasta ahora exitosos avances en programas de asistencia como Cuna Más, Qali Warma o Pensión 65, todos ellos proyectos gubernamentales destinados a reducir la pobreza implementados durante las vacas gordas, pero que con la llegada de tiempos menos propicios para el conjunto de la sociedad,comienzan a tambalearse entre el miedo y el egoísmo de amplios sectores proletarios beneficiados anteriormente por esos mismos programas y la firme intención de renunciar al crecimiento económico inclusivo en búsqueda del máximo beneficio por parte de las élites. La lógica del liberalismo ha creado hoy un Perú menos comunitario, un país dispuesto a hacer de la pobreza un autentico muro físico.

Mientras tan solo unos cuantos peruanos se enriquecen en lo que los liberales consideran uno de los mayores milagros de su teoría económica, millones observan como la desesperanza comienza a atenazar de nuevo a la población. Intentar camuflar que tras el crecimiento económico y la inversión extranjera en Perú se encuentra un proyecto que asume a grandes capas desheredadas de la población como meros sacrificios humanos en el altar del capitalismo, supone cerrar los ojos ante la realidad de un país que sigue  sufriendo una alta tasa de pobreza rural, y en donde cada día miles de personas se quedan fuera de las inversiones en áreas tan básicas para su desarrollo como la salud o la educación. La precariedad endémica en la inversión social, la escasa cultura tributaria  y la aparición al compás de la crisis económica de unas condiciones de trabajo precario -llegando incluso en ocasiones a convertirse en trabajo forzado- nos presenta una radiografía de una sociedad peruana muy alejada de los éxitos económicos por los que brindan en las altas instituciones del país. 

La distopía del control de acceso a los barrios más favorecidos por el sistema supone un reclamación que va en aumento en sociedades en las que los ricos cada día son más ricos y pretenden alejarse lo máximo posible de las consecuencias negativas del contacto con la pobreza

A un lado del muro piscinas, cuidados jardines, coches europeos y lujo, al otro simplemente miseria. Las vías que conectan las dos realidades de la capital peruana son simples caminos de tierra plagados de piedras por los que los empleados de las zonas pobres se desplazan cada día para trabajar en el servicio doméstico del lado rico de Lima, entre esos dos mundos se levanta la muralla de piedra y las alambradas que configuran esta frontera física en una de las economías más sólidas de una región que junto con el Caribe es la más desigual en ingresos en el mundo -en 2014 el 1% más rico poseía el 41% de la riqueza regional, mientras que el 99% restante debía repartirse el 60%- una frontera que descubre el delicado equilibrio que las élites peruanas y el propio sistema capitalista mantienen entre el temor a la revuelta de los más desfavorecidos y la total dependencia con una masa proletaria precarizada con la lograr mantener al alza sus beneficios económicos.

En pocos lugares del mundo se puede observar de forma tan clara la línea que separa la esperanza del total abandono como en Perú, en Lima, la ciudad de las jaulas para pobres, la seguridad ciudadana ha sido el argumento que los más ricos han esgrimido para comenzar a preparar su defensa frente a las inmediatas consecuencias de las políticas económicas adoptadas en la última década en el país. Frente a las casas valoradas en millones de dólares y la seguridad privada, distritos compuestos por edificaciones de madera escasamente organizadas en el territorio se enfrentan a diario a una delincuencia de la que quienes pueden permitírselo huyen, el muro también supone una delimitación entre la vida y la muerte.

Los contrastes socioespaciales y las barreras arquitectónicas entre clases sociales presentes en las ciudades no son ni mucho menos un invento exclusivo de los peruanos, la distopía del control de acceso a los barrios más favorecidos por el sistema supone un reclamación que va en aumento en sociedades en las que los ricos cada día son más ricos y pretenden alejarse lo máximo posible de las consecuencias negativas del contacto con la pobreza. La segregación racial y espacial que vivieron numerosas comunidades en ciudades como Los Ángeles o Miami, donde las autopistas sirvieron directamente como barreras físicas que aislaban los vecindarios blancos de los negros o las proliferación de lujosas urbanizaciones como Terre Blanche o El Viso, son el fiel reflejo del triunfo de la más desgarradora lógica capitalista: Todo tiene un precio, incluso el derecho a disfrutar del espacio en nuestras ciudades

Los habitantes de San Juan de Miraflores no saben nada de las supuestas bondades del liberalismo

Los muros de la vergüenza no se levantan en un solo día, ni comienzan a dividir a las comunidades a partir del primer ladrillo, los muros entre ricos y pobres se encuentran en las diferentes cifras de paro por barrios, en las calles limpias del centro frente a la suciedad en las aceras obreras, en la ubicación de los centros de desintoxicación, la frecuencia de las patrullas policiales, los distintos equipamientos de colegios y hospitales, la presencia de la droga en sus calles o la cantidad de comercios cerrados. Los muros de la vergüenza comienzan a construirse cuando un gobierno decide que soterrar las vías del AVE a su entrada en la ciudad resulta demasiado caro para la administración. Cuando el 1% más rico del planeta ya tiene tanto como el otro 99%.

Texto: Daniel Seijo


Sobre este blog
Periodismo alternativo, opinión política y concienciación social.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Pensiones
Pensiones Cotizaciones ficticias, ¿un parche en la brecha de género en las jubilaciones?
La compensación por cuidados de hijos y familiares puede llegar a sumar hasta cinco años de cotización, pero no es suficiente para que muchas mujeres logren la pensión digna.
El Salto Radio
El Salto Radio A dos velas
El documental “A dos velas”, de Agustín Toranzo indaga en las causas de los cortes de suministro eléctrico sistemáticos e indiscriminados que varios barrios obreros de Sevilla vienen denunciando desde hace años.
Anónimous
1/12/2017 22:20

Hoy he leído tres magníficos artículos en "elsalto", sobre Honduras, México y Perú, los tres abordadan diferentes asuntos pero todos ponen el foco en el origen de esos problemas... Fraude electoral como cotinuación del Golpe de Estado, Capitalismo Gore y los muros del neoliberalismo del 1% contra 99%.
Distopía era esto.

1
0
Daniel Seijo
2/12/2017 16:52

Orwell y Huxley se han quedado cortos en algunos casos.

0
0
Sobre este blog
Periodismo alternativo, opinión política y concienciación social.
Ver todas las entradas
Laboral
Laboral Reivindicar los derechos laborales en micro empresas, el reto de los sindicatos
Nuevas estrategias hacen frente a realidades como las de los falsos autónomos o los puestos en remoto, mientras el PP quiere restringir aún más los comités de empresa.
Palestina
Palestina Albanese presenta su informe ante la ONU: “Gaza es el escenario de un crimen”
El Consejo de Derechos Humanos atiende al reporte sobre el lucro de empresas y bancos en el actual genocidio de Gaza. The Guardian califica de “posible crimen de guerra” el ataque contra una cafetería en la que murieron 39 personas.
Política
Política Feijóo radicaliza al Partido Popular en medio del terremoto Cerdán con la vista puesta en las elecciones
Miguel Tellado será el nuevo secretario general del partido. Un movimiento con el que Feijóo consigue el control casi absoluto del PP y le come espacio del discurso ultra a Vox, pero que lo aleja de eventuales pactos con PNV y Junts.
Galicia
Galicia Galicia elige el rumbo de la lucha contra Altri en las elecciones a la directiva de la plataforma Ulloa Viva
Vecinos y vecinas de la comarca más afectada presentan dos listas separadas tras no llegar a una propuesta de consenso. Por un lado concurre una candidatura continuista y, por el otro, una alternativa que se acerca más al nacionalismo institucional.
En el margen
En el margen Aisetou Kajakeh: “Nosotras no estamos rompiendo techos de cristal, sino sorteando muros”
Esta socióloga española asegura que las asociaciones gambianas en España mantienen un vínculo directo con el lugar de origen, lo que hace que nunca pierdan la conexión con las raíces.
Opinión
Opinión Espejismo España
La descomposición del Gobierno de coalición es un reflejo de la expansión de la ola ultraderechista, pero no implica que los movimientos de transformación no puedan organizarse para contrarrestar esa amenaza.
Tribuna
Regadíos Regar con un agua que no tenemos ni tendremos
Se encona la lucha por el control de un agua de la que somos deficitarios, exponiendo amplios territorios a la desertificación y el abandono.

Últimas

Comunidad de Madrid
Sanidad Pública Cae el techo de la entrada principal del Hospital Isabel Zendal
El hospital de pandemias, inaugurado por Isabel Díaz Ayuso en 2020 y que generó unos sobrecostes del triple de lo presupuestado en su construcción, ha visto cómo se desplomaba el techo de entrada.
Córdoba
Turismo El número de pisos turísticos en Córdoba se reduce a los tres meses de la moratoria para nuevas licencias
Otras normas tratan de limitar la proliferación de las viviendas de uso turístico por la ciudad. Un portavoz de Stop Desahucios predice que estos pisos se trasladarán a los barrios no afectados por la moratoria.
Naciones Unidas (ONU)
Genocidio El Informe Albanese denuncia ante la ONU a las empresas que se han lucrado del exterminio en Gaza
La relatora presenta un informe al Consejo de Derechos Humanos en el que detalla la responsabilidad de decenas de empresas en las políticas de ocupación, apartheid y genocidio que está llevando a cabo Israel en Palestina.
Crisis climática
Datos El junio más cálido jamás registrado cierra con 330 fallecimientos por calor
103 personas han muerto en los primeros tres días de la ola de calor, según las estimaciones. Los datos de la Aemet señalan al pasado mes como el junio más caluroso; ha pulverizado la máxima anterior por 0,8 grados de diferencia.
Oriente Medio
Oriente Medio La plantilla de EFE en Oriente Medio denuncia salarios por debajo de los mil euros
La delegación, formada por 24 personas, anuncia paros en sus funciones al verse reducida más de un 25% su nómina sin opción a negociar.
Más noticias
Alquiler
Racismo y alquileres Siete de cada diez migrantes se ve en la necesidad de vivir de alquiler frente al 14% de los hogares españoles
“El precio del prejuicio” es el título del más reciente estudio del Instituto de Investigación Urbana de Barcelona, IDRA, en el que disecciona la relación entre las personas migrantes y su acceso a la vivienda.
Comunidad de Madrid
Sanidad privada Inspección propone sancionar a un hospital de Quirón por exponer a la plantilla a sustancias cancerígenas
El organismo inicia un procedimiento administrativo sancionador por infracción grave. Tras una visita al Hospital Quirónsalud Sur, de Madrid, constataron deficiencias en la zona de almacenamiento de los productos farmacéuticos y en el mortuorio.
València
València Una comunidad vecinal lucha para impedir el enésimo proyecto de bajos turísticos en València
El vecindario de un bloque en Aiora se organiza contra la construcción en su patio de luces de catorce alojamientos turísticos en una zona ya saturada de este tipo de negocios.

Recomendadas

Salud mental
Laura Martín López-Andrade “La psiquiatría es una profesión potencialmente muy peligrosa”
La psiquiatra granadina defiende desde Málaga otro tipo de psiquiatría que huye de los diagnósticos y de la jerarquía y cambia la palabra tratamiento por acompañamiento.
Malasia
Malasia Durian, la fruta fétida que triunfa en Asia
El durian es tan maloliente que su consumo está prohibido en interiores, pero la popularidad de esta fruta, considerada un superalimento, no deja de aumentar en China y en el resto de Asia.