Italia
La extradición de Cesare Battisti: donde Bolsonaro y Salvini se dan la mano

La extradición el pasado lunes de Cesare Battisti, tras 38 años de fuga de la justicia italiana, provee a Salvini y Bolsonaro de un marco para exhibir modos e intereses comunes y lanzar un aviso a navegantes.
Cesare Battisti
Retrato de Cesare Battisti
16 ene 2019 10:33

El lunes 14 de enero Cesare Battisti aterrizaba en Roma donde le esperaban el primer ministro italiano Giuseppe Conte, el ministro de Interior, Matteo Salvini y el de Justicia, Alfonso Bonafede. Antiguo integrante de los Proletarios Armados por el Comunismo (PAC), uno de los grupos de izquierda que en los años 70 abrazó la lucha armada, Battisti había sido un día antes arrestado en Bolivia. Terminaban así casi cuarenta años de huida tras haber sido condenado en 1981 por pertenencia a banda armada y declarado culpable en 1993 por su implicación en cuatro asesinatos ocurridos a finales de la década de los 70. Al detenido le espera la cadena perpetua en su país.

“En directo desde el aeropuerto de Ciampino, finalmente el asesino comunista #CesareBattisti vuelve a la patria preso. Jornada histórica para Italia”, con estas palabras compartía Salvini el vídeo de la llegada del prófugo en Twitter. Un episodio más de una espectacularización que ha sido criticada en su país, donde se ha acusado al mediático y siempre provocador líder de la Lega de querer capitalizar el encarcelamiento con fines políticos. “Se acabó la diversión”, había ironizado el mismo domingo 13 cuando se conoció la detención.

Cesare Battisti siempre se declaró inocente de los cargos de asesinato. Huido el 4 de octubre de 1981, cuando ya estaba preso en la prisión de Frosinone (Lacio), se trasladó a Francia donde permaneció hasta el 2004, año en el se concedió su extradición a Italia. Desde entonces había vivido en Brasil, donde llegó a obtener el asilo político durante unos meses en 2009. Y aún cuando le fue retirado, el presidente Lula decidió no extraditarlo. Mantuvo el refugio hasta octubre de 2017 cuando el entonces presidente Michel Temer decidió retirárselo. Battisti recurrió la orden y durante un año el caso quedó en suspenso.

Se especuló con la posibilidad de que antiguos arrepentidos del PAC adjudicasen al excamarada prófugo crímenes en los que no habría participado
Si Battisti escapó de la justicia italiana por casi cuatro décadas fue porque contó con protección. Por un lado, entre la izquierda hubo quienes dudaron de la veracidad de los cargos, Battisti siempre se declaró inocente, y se especuló con la posibilidad de que antiguos arrepentidos del PAC adjudicasen al excamarada prófugo crímenes en los que no habría participado. Por otro lado, Francia y Brasil, países donde vivió sin que fuera extraditado, consideraron que en Italia los derechos humanos de Battisti no serían garantizados. Durante 15 años, entre 1981 y 1995, la conocida como “doctrina Miterrand” permitió que numerosos prófugos italianos provenientes de las Brigadas Rojas y otros grupos similares permanecieran en territorio francés.

Años de plomo

El fin de los años sesenta y la década de los setenta, fue un periodo que se caracterizó por una intensa violencia en Italia. Ahí estaba la violencia del Estado, los pequeños grupos de izquierda que, como las Brigadas Rojas, no renunciaban a la violencia como herramienta política, o los grupúsculos neofascistas. La conflictividad social y su respuesta autoritaria protagonizaron los llamados años de plomo italianos.  Las luchas que arrancaran en el 68 supusieron un desafío ante el cual el gobierno de la época activó una onda represiva cuyo resultado fue la encarcelación de cientos de militantes de izquierdas, muchos de ellos liberados posteriormente sin pruebas.

“¡Felicidades a los responsables por la captura del terrorista Cesare Battisti! Finalmente se hará justicia para un asesino italiano y compañero de ideales de uno de los gobiernos más corruptos de existieron en el mundo (PT)”, así aprovechaba Jair Bolsonaro la detención para atacar al Partido de Lula. Bolsonaro ha sido la pieza fundamental en el desenlace de la historia de Battisti. Fue en octubre de 2018 cuando el presidente brasileño se comprometió con el gobierno italiano a extraditar a Battisti. El fugitivo partió a Bolivia, de donde fue finalmente expulsado el domingo.

“El regalito está llegando”, escribía el hijo de Bolsonaro para Salvini en Twitter ante la extradición de Battisti

“El regalito está llegando”, escribía el hijo del presidente Eduardo Bolsonaro a Salvini en twitter ante la extradición de Battisti, para no dejar dudas sobre la buena sintonía, también en lo personal, entre su padre y el ministro italiano. De hecho la expulsión directa desde la Paz ha permitido algo que no hubiese sido posible si hubiese pasado por Brasil: el cumplimiento íntegro de la condena. La legislación brasileña no permite la cadena perpetua, lo cual hubiese impedido que Salvini pudiera declarar en la televisión, sobre Battisti: “Puedo garantizar que acabará su vida en la cárcel, no saldrá ni un cuarto de hora antes de lo previsto”.

Mientras, la decisión del gobierno boliviano de entregar directamente a Battisti —sin derecho a defensa ni respetando los procesos judiciales—  ha motivado el descontento desde las propias filas del MAS, por la facilidad con la que Evo Morales se habría plegado a los deseos de Bolsonaro con quien confía negociar la venta de gas. Muy comentado fue en el país el reproche del hermano del vicepresidente Álvaro García Linera, Raúl quien publicó sobre este tema: “Hoy, por primera vez, este proceso de cambio actúa contrarrevolucionariamente, hoy los intereses del Estado se pusieron por encima de la moral revolucionaria, de la praxis revolucionaria”.

Mientras tanto, en Italia, todo el arco parlamentario celebró la detención de Battisti. “Espero que no haya cantante, político o intelectual que esté de su parte”, avisaba Salvini en otro de sus tuits, el mismo domingo. No ha habido una oleada de solidaridad, pero antiguos militantes de Rifondazione Comunista y otros partidos comunistas hablaban de amnistía, dado el tiempo transcurrido desde los hechos. También critican que la detención se haya convertido en un “trofeo” para Salvini y Bolsonaro, criticando la alianza con el líder brasileño. No se ignora la cruzada contra el comunismo que Bolsonaro ha anunciado a través de sus encendidas proclamas. Por otro lado Salvini ya ha anunciado que la de Battisti será la primera de muchas encarcelaciones de “terroristas comunistas” huidos en aquellos tiempos.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Italia
Italia Venecia no se rinde ante Jeff Bezos
La ciudad de los canales regala a Bezos varias protestas antioligarquía por su boda.
Italia
Enfoques Biocidio: la larga lucha contra la catástrofe ambiental en la Tierra de los Fuegos
Durante tres décadas, empresas, particulares y organizaciones criminales, con el beneplácito del Estado italiano, convirtieron esta región ubicada en Campania en una de las más contaminadas de Europa.
#29450
22/1/2019 2:29

Cuando los clarines del dineros suenan, los llantos de los revolucionarios callan.
Jajajajajajajajajajajaja
Battisti a Salvini para que Bolsonaro quede bien y le compre gas a Bolivia.
Bussines are bussines

0
0
#29256
17/1/2019 18:06

Y los criminales derechistas de la Operación Gladio continúan libres e impunes. Qué injusticia.

1
3
#29214
16/1/2019 16:00

Aquí quien peor queda es el gobierno de Bolovia, de los facahas que se esperaba?

6
2
Corrupción
Corrupción El juez decreta prisión provisional sin fianza para Santos Cerdán
El juez acepta la propuesta del fiscal y decreta cárcel contra el ex secretario de organización socialista por integración en organización criminal, cohecho y tráfico de influencias.
València
València La Audiencia de Valencia confirma la imputación a Argüeso en el juicio de la dana
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial concluye que la resolución de la instructora “no es irrazonable ni arbitraria”, ratificando la imputación del ex secretario autonómico de Emergencias.
Barcelona
Derecho a la vivienda Amenazas de violencia extrema y una paliza a los habitantes de un bloque okupado de Barcelona
El Salto accede a las llamadas y mensajes de audio amenazadores que un grupo de desokupa envía al vecindario del bloque Llenguadoc, donde confirma cumplir con el mandato del propietario del edificio.

Últimas

Palestina
Tribuna Tres o cuatro días sin comer en Gaza
El drama de no poder dar suficiente comida a tus hijos es inmenso, sobre todo cuando sabes que a pocos kilómetros hay camiones llenos de ayuda. Parados. Bloqueados.
Gobierno de coalición
Gobierno de coalición La fuga de más diputados de Sumar, en manos de Sánchez
Más representantes de las confluencias aguardan a la comparecencia del presidente del Gobierno del 9 de julio como la última señal para no saltar al grupo Mixto.
Más noticias
Medio ambiente
Tribuna Mapa de los conflictos del agua: una herramienta para la defensa de los ríos, acuíferos y humedales
A pesar del grado y extensión del daño que sufren los ríos, acuíferos y humedales, las administraciones públicas no están tomando las medidas necesarias para frenar el deterioro y responsabilizar a las entidades que lo causan.

Recomendadas

Economía social y solidaria
Historia Lo que Franco arrebató al cooperativismo y a la economía social y solidaria
La dictadura franquista combatió de forma cruel el movimiento cooperativo fraguado en la II República, y durante la propia guerra con las denominadas colectividades, y pervirtió la idea de autogestión a través de los ideales falangistas.
Río Arriba
Río Arriba Yayo Herrero: “El holocausto nazi no es una excepcionalidad en la historia de Europa, es un modus operandi”
Nueva entrevista de Río Arriba en formato podcast y vídeo en el que hablamos de ecofeminismo, transiciones ecosociales justas, decrecimiento, colapso, poner la vida en el centro y mucho más.
En el margen
Cécile C. Eveng “Perdemos amigues y es una pena porque las personas LGTBIQ pueden ayudar a desarrollar África”
La filóloga camerunesa reside actualmente en España y estudia un doctorado en migraciones, cuerpos, negrofobia y vulnerabilidad de personas. Investigar sobre identidades disidentes en su país le ha traído críticas, hasta desde la propia academia.