Cine
Death Note: A veces hay que elegir el mal menor

Se estrenaba en agosto una nueva revisión del manga japonés Death Note, tratándose esta vez de una producción estadounidense y no nipona. La historia que ha cautivado a medio mundo primero desde el papel, llegó este verano a Netflix. Adam Wingard, director de la versión americana, tenía mucho material del que tirar.

Libro Death Note
19 sep 2017 10:00

Vista la película, cabe interpretar que Wingard y sus guionistas han analizado con cierto interés todo ese material previo. Su Death Note respira respeto por el original, pero se desinfla completamente como adaptación tomando la decisión de ir por la calle de en medio: respeta las pautas más marcadas de la historia, pero las condensa –muchas ideas en muy poco tiempo– e inevitablemente sacrifica el contexto original para situarlo en Estados Unidos –en la ciudad de Seattle, concretamente–, con todo lo que ello conlleva. El hecho de querer romper también con la idea de los personajes ya creados, desde luego, no deja contento a ningún seguidor de la serie previa. Un Light rubio –y bastante insoportable– y un L negro –de nula credibilidad– estéticamente no se ajustan al concepto que todos tenemos de Death Note, y eso mina la verosimilitud de la obra desde el primer momento. Esta versión también rompe el esquema vertebral de la trama y cambia el punto de partida de Light como usuario único del cuaderno de muerte para compartirlo con Mia –traslación del personaje de Misa Amane, aunque poco tienen que ver en la práctica–, convirtiendo su relación en la base principal de la historia, alejándose de la premisa de Light como remarcado sociópata y centro único de toda la trama ética y moral, verdadero motor y punto de interés del argumento. No ayuda ese aire de película de instituto americana y una tendencia poco disimulada a la puerilidad que pretende ser maquillada con dureza impostada –un buen número de tacos que no encajan con el tipo de relato– y algunas imágenes explícitas para las muertes, otro sinsentido que pone de manifiesto lo poco claro que tiene el director el público al que se dirige y el tipo de historia que quiere contar. Todo este batiburrillo termina dando una única impresión: el film es ingenuo en un mal sentido. Es tonto y superficial, muy lejos del Death Note original, marcado por unos planteamientos inteligentes aquí sintetizados a la mínima expresión, y unos personajes en origen ricos en detalles y matices, que en la nueva versión se quedan en una simpleza casi insultante.

Usar una buena historia para simplificarla

El gran problema de este Death Note es partir de la base del manga original y retorcerlo a su antojo. Escoge unas premisas básicas para no dejarse por el camino los puntos clave, pero los cambios formales hacen que pierda casi toda su esencia. Solo hay leves pinceladas sobre la cuestión moral de que alguien asesine a los delincuentes del mundo, sobre quién es el inocente y quién el culpable, y cómo es aceptado socialmente. Tampoco nos encontramos la intensidad del enfrentamiento entre Light y L, todo se apunta pero se pasa por encima de puntillas. Es un quiero y no puedo constante, aderezado con un intento de crear también un contexto propio que lo aleje de la simple adaptación, precipitándolo al abismo como obra basada en otra obra. El Death Note de Netflix, como película individual es bastante pobre aunque puede llegar a entretener a un espectador casual –quizás solo adolescente–. Como adaptación es terrible, simplista, superficial, pueril y muy poco acertada. Un despropósito que se une a las muchas adaptaciones americanas de manga interesantes y de éxito que terminan siendo películas estadounidenses para olvidar.

Lo cierto es que era una adaptación destinada al fracaso, pues la fidelidad al original era imposible y estaba ya muy visto; y el intento de innovación y resumen de un film de hora y media –como finalmente es– era un suicidio de cara a sus seguidores. No llega a los límites de vergüenza ajena de Dragon Ball Evolution –paradigma de adaptación errónea–, pero no aporta absolutamente nada, es intrascendente. Al que le guste Death Note lo único que le provocará serán ganas de volver a ver la serie anime japonesa para borrar cuanto antes que alguna vez vio esta adaptación. 

Alguien debería decirle a las majors estadounidenses que adaptar manga y anime japonés es una muy mala idea. Nosotros nos ahorraríamos bastantes decepciones y ellas, un buen dinero.

Archivado en: Cine
Sobre este blog
Todo es política. Cine y series.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Cine
Ramón Lluis Bande “Asturies tiene sin construir el relato de su tiempo revolucionario”
El cineasta Ramón Lluis Bande entiende la memoria histórica como un “camino de exploración formal infinito” y de reflexión sobre el propio lenguaje cinematográfico “en relación con la realidad, la historia, el arte y la política”.
Notas a pie de página
Notas a pie de página La fantasía de las esposas perfectas
Hace mucho tiempo que la figura de la abnegada esposa tiene cuota de pantalla. Una obra literaria de ciencia ficción, escrita en los años 70, ha sido adaptada hasta tres veces al cine, en cada ocasión según la atmósfera de la época.
En el margen
Thimbo Samb “Ganar el Goya con ‘Los cayucos de Kayar’ implicaría que el mundo del cine español valora historias diversas”
Cansado de los papeles que le ofrecen como actor negro, Thimbo Samb busca sus propias historias para mostrar de lo que es capaz, la última, un documental sobre su propia vida, que ha sido preseleccionado para los Premios Goya.
#7939
5/2/2018 1:01

Creo que el único público que aceptaría en algún grado esta versión como película para pasar el rato, sería alguien que no conozca, ni de oídas, la historia original. Y seguramente en edad adolescente, como dices.

0
0
Sobre este blog
Todo es política. Cine y series.
Ver todas las entradas
Oriente Próximo
Oriente próximo La diáspora kurda ante la caída de Bashar al-Assad
Siria enfrenta el fin de un régimen que durante décadas pareció inquebrantable. Desde la diáspora, la esperanza contenida de quien ha vivido demasiadas traiciones y promesas incumplidas.
Análisis
Análisis Rojava en peligro
Las intenciones de Turquía en Siria ponen en peligro no solo la Administración Democrática Autónoma del Norte y Este de Siria (AADNES) sino también la convivencia del resto de minorías presentes en el país.
Amazonía
Caso Chevron Pablo Fajardo: “Sacrificaron la Amazonía y la vida de la gente por racismo y por la ganancia económica”
El activista y abogado Pablo Fajardo fue elegido hace casi 20 años por la Unión de Afectados por Texaco para el juicio más importante contra la petrolera Chevron. Dos décadas después sigue luchando por la justicia ambiental y social en Ecuador.
Especulación inmobiliaria
Especulación en Madrid Las vecinas de Tribulete, 7 denuncian la especulación de Élix Rental Housing con una acción musical “fúnebre”
VV.AA.
30 inquilinas de este bloque resisten en sus hogares pese a que este fondo buitre ya ha adquirido la totalidad del edificio para convertir los pisos en apartamentos turísticos. Este sábado, han vuelto denunciar el proceso de gentrificación del barrio
Que no te cuenten películas
Comunidad El Salto Suscríbete a El Salto y llévate seis meses de regalo a Filmin
Estas navidades, haz posible que El Salto llegue más lejos con sus contenidos críticos y llévate de regalo medio año de Filmin. Y si ya tienes Filmin, suscríbete a El Salto y regala el acceso a esta plataforma a quien quieras.
Ley de Seguridad Ciudadana
Congreso de los diputados Reforma de la Ley Mordaza: ¿esta vez sí se puede?
Una de las mayores deudas de toda la izquierda del Estado español parece que está a punto de saldarse.
La vida y ya
La vida y ya Ya no sé quién vive en el primero
El barrio se ha transformado tanto que pueden pasar semanas sin ver por la calle una sola cara conocida porque los vecinos han sido sustituidos por turistas.

Últimas

Derecho a la vivienda
Vivienda El Sindicato de Vivienda de Euskal Herria propone la “expropiación de pisos turísticos”
Ponen en el punto de mira los intereses del sector inmobiliario y tachan de “falsas” a todas las medidas propuestas por los partidos políticos como la Ley de Vivienda.
Análisis
Análisis El independentismo se reorganiza, pero ¿sigue siendo independentista?
Los partidos independentistas han sufrido la crisis del procés y el posprocés, y todavía no la han resuelto, sino, a lo sumo, la han aplazado. El PSC aparece como el ganador de una carrera con corredores agotados.
Opinión
Tribuna Todas las razones para decir ‘Altri non’
Aquí van unos cuantos motivos para juntarnos este domingo en Compostela y dejar clara nuestra postura frente a un expolio que nos están tratando de imponer disfrazado de progreso, pero que sólo trae beneficio económico a unos cuantos indeseables.
Opinión
Opinión La oportunista invasión israelí de Siria
Desde la caída de Bashar al-Assad, Israel ha llevado a cabo una invasión de Siria sin provocación previa y con el apoyo de Estados Unidos. Los objetivos son claros.
Más noticias
Relato
Relato Descubrirse las manos
Descubres tus manos: el palmar y el dorso, la posibilidad futura de la pinza atrapacosas, dos miembros que te vinculan al chimpancé y al lémur. Aprendes su mecanismo.

Recomendadas

Literatura
Gustavo Faverón Patriau “Quizá la novela sea ahora mismo más relevante que nunca”
El escritor peruano Gustavo Faverón Patriau quería narrar en su nueva novela la historia de un boxeador que no sabía boxear pero tumbaba a sus rivales recitándoles al oído versos de César Vallejo. ‘Minimosca’ acabó siendo un cuentacuentos inagotable.
Galicia
Memoria histórica Así fue como el Patronato de Protección a la Mujer transformó Galicia en un convento de clausura
Las mujeres que cayeron en las redes del Patronato iniciaron un periplo de encierro, humillaciones, abusos y explotación que es desconocido para la mayor parte de la población. Queda hoy en la impunidad de un silencio que tenemos el deber de romper.
Palestina
Eyad Yousef “No cuentes lo que queremos ser, cuenta lo que nunca hemos dejado de ser: un pueblo que quiere la paz"
Eyad Yousef es profesor en la Universidad de Birzeit, Cisjordania, y comparte su experiencia en una universidad que “representa el pluralismo y la libertad que tanto anhela la sociedad palestina”
Pensamiento
Sarah Jaffe “En realidad tenemos que hacer menos. E impedir que algunas cosas sucedan”
La escritora y periodista Sarah Jaffe aborda el desengaño cotidiano al que nos aboca el mundo laboral e investiga cómo, a pesar de todo, las personas se organizan colectivamente en sus empleos para que “trabajar apeste menos”.