Crisis climática
La Cumbre Africana por el Clima, entre el afán por una posición común y la injerencia occidental

Los países del continente africano buscan unir fuerzas para conseguir mayor financiación frente a la crisis climática. Sin embargo, medio millar de organizaciones sociales alerta de la influencia y el control de la cumbre por parte de intereses prooccidentales en detrimento de África.
Africa Climate Summit 2023
La cumbre del Clima de África, se celebra en Kenia entre el 4 y el 8 de septiembre.

Coordinador de Clima y Medio Ambiente en El Salto. @PabloRCebo

5 sep 2023 13:17

Por primera vez los líderes países africanos, así como de sus instituciones económicas, se han reunido para tratar la crisis climática a escala regional. El encuentro, que tiene la capital keniata como epicentro, tendrá lugar entre el 4 y el 8 de septiembre y ha sido auspiciado por la Unión Africana.

El objetivo de fondo es que las 54 naciones del continente tengan una posición común ante la crisis de cara a la próxima Cumbre del Clima de las Naciones Unidas, COP28. África es la región del mundo que menos ha contribuido a crear el cambio climático, sin embargo, es una de las que más se está viendo afectada por sus efectos. En palabras del presidente anfitrión durante el discurso inaugural del encuentro, el presidente keniano, William Ruto, “la huella de carbono africana sigue siendo pequeña, pero el peaje humano que produce el cambio climático es desproporcionadamente alto”.

La pobreza que afecta a gran parte de su población, así como la incapacidad de los Estados para hacer frente a la crisis ante la falta de recursos, hace que los impactos vayan a ser más duros que en otras partes del mundo, por lo que la financiación es la clave del debate. “La urgencia de abordar las pérdidas y los daños, y de configurar mecanismos financieros adecuados para la resiliencia, crece con cada evento climático extremo”, apuntaba Ruto en el discurso inaugural.

Daños, pérdidas y adaptación

La COP27 de tuvo un avance en lo respectivo a la financiación para las pérdidas y daños en los países con menos recursos. Su texto final consiguió salvar un acuerdo in extremis por el que la comunidad internacional reconoce la necesidad de crear un fondo a tal respecto para las naciones más vulnerables. Sin embargo, las dificultades para alcanzar un acuerdo supusieron que su concreción aún no esté sobre la mesa y deba ser desarrollado y ampliado en la próxima COP28. Tal como denunciaban desde Ecologistas en Acción tras finalizar la última cumbre del clima de Sharm el-Sheij, “la polarización y lentitud de las discusiones ha impedido el avance en la metodología y en el diseño de próximos pasos para su puesta en marcha rápida”.

Donde no hubo acuerdo fue en otra de las reivindicaciones que han lanzado las naciones africanas: la financiación para la adaptación. La falta de cifras concretas para tener un Fondo Verde para el Clima realista fue uno de los fracasos de una cumbre en la que las organizaciones sociales denunciaron una amplia y creciente participación e influencia de las multinacionales más responsables de las emisiones de gases de efecto invernadero actuales.

No obstante, es en este punto donde la presidencia keniana está poniendo el foco en la cumbre africana, apostando por la inversión en la transición energética y en mecanismos polémicos, como los mercados voluntarios de carbono, inversiones que permiten a países y empresas contaminantes “compensar” sus emisiones por créditos o bonos. “Debemos ver el crecimiento verde no solo como un imperativo climático sino también como una fuente de oportunidades económicas multimillonarias que África y el mundo están preparados para capitalizar”, declaraba Ruto.

Exigencia de cambio de rumbo

El respaldo de este enfoque por parte de la presidencia de la cumbre africana, junto a anuncios como los de Emiratos Árabes Unidos, que pretende apoyar la Iniciativa de Mercados de Carbono de África (ACMI) aportando 450 millones de dólares para los mercados de carbono africanos, ha llevado a organizaciones de la sociedad civil a poner el grito en el cielo ante el rumbo que está tomando la cumbre.

En una carta dirigida a Ruto, quien es presidente del Comité de Jefes de Estado y de Gobierno de África sobre el Cambio Climático (CAHOSCC), más de 500 organizaciones de la sociedad civil, señalan que “en lugar de promover los intereses y la posición de África sobre cuestiones climáticas críticas, la cumbre ha sido aprovechada por gobiernos occidentales, empresas consultoras y organizaciones filantrópicas empeñadas en impulsar una agenda e intereses prooccidentales a expensas de África”.

En concreto, los colectivos denuncian la especial influencia en el encuentro de la consultora estadounidense McKinsey and Company, la más grande de las llamadas Big Three, las multinacionales consultoras de gestión más importantes del mundo. A juicio de de las organizaciones, el documento de concepto emitido para la cumbre por esta empresa —integrada en la organización de la misma— está guiando el enfoque de toda el encuento mientras “refleja los intereses de Estados Unidos, McKinsey y las corporaciones occidentales que representan”.

Asimismo, denuncian que organizaciones con sede en EE UU como el Instituto de Recursos Mundiales, así como a algunas organizaciones africanas que promueven la agenda occidental, se les ha asignado un papel “desproporcionadamente enorme en la organización del evento”. Como resultado, “la agenda de la Cumbre pone en primer plano la posición y los intereses de Occidente, es decir, los mercados de carbono, el secuestro de carbono y los enfoques ‘climáticamente positivos’”. 

Soluciones 'falsas'

Para las organizaciones de la sociedad civil, aglutinadas en la contracumbre Real Afrcian Climate Summit, este tipo de conceptos y soluciones falsas están liderados por intereses occidentales mientras se publicitan como soluciones africanas. “Estos enfoques alentarán a las naciones ricas y a las grandes corporaciones a seguir contaminando el mundo, en gran detrimento de África”, lamentan.

La confederación de colectivos ha pedido a Ruto un reinicio del enfoque de la cumbre y ha propuesto una batería de propuestas para enderezar el encuentro, empezando por retirar el control y la influencia de McKinsey y poner en su lugar a un grupo de expertos liderado por africanos. 

Consideran crucial adoptar un enfoque integral a las cuestiones climáticas, energéticas y de desarrollo de África como continente, huyendo de conceptos como un “crecimiento verde”que, según denuncian, “simplemente promoverán el neocolonialismo”. Reniegan de mecanismos como los mercados de carbono o la ingeniería, “diseñados para alentar a los países y personas ricas para seguir convirtiendo África en un vertedero y en un campo de pruebas tecnológicas”; y exigen un fuerte impulso de la energía renovable para contrarrestar el poder de la industria de los combustibles fósiles y las naciones productos de petróleo, agentes que pueden, según afirman, “secuestrar la transición energética justa de África”.

Green European Journal
Green European Journal ¿Quién paga los platos rotos del calentamiento global?
El Green European Journal entrevista a Lucas Chancel, economista especializado en desigualdad y crisis climática.
“Esta Cumbre debería tener como objetivo construir sistemas de energía renovable y atraer inversiones en el sector. África soporta la peor parte de la catástrofe climática y no puede darse el lujo de promover el gas como combustible de transición”, denuncia Lorraine Chiponda, cofacilitadora del Movimiento Africano Construyendo Espacio. Para esta activista, este enfoque “encerrará al continente en deudas perpetuas, trampas estructurales y activos varados mientras el resto del mundo se limpia”.

La cumbre finalizará el 8 de septiembre y de ella depende en gran parte el posicionamiento de las naciones africanas en la próxima COP28, que comenzará el 30 de noviembre y se celebrará en una de las naciones africanas más defensoras de los petrodólares, Emiratos Árabes Unidos. Aún sin comenzar la cita ya ha generado polémica, pues 450 grupos exigieron en enero la destitución del presidente de la misma designado por Abu Dabi. La razón: el hombre designado para capitanear las negociaciones climáticas, el sultán Ahmed Al Jaber, no solo es el ministro de Industria del país, también dirige la petrolera estatal ADNOC.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Crisis climática
Nuevo hito climático El pasado mes fue el abril más caluroso jamás registrado
Con una temperatura promedio del aire en la superficie de 15,03ºC, el pasado mes fue 0,67ºC más caluroso que el promedio de dicho mes entre los años 1991-2020 y 0,14ºC más que el anterior récord, el de abril de 2016.
Contaminación
Contaminación Los entornos escolares suspenden en calidad del aire
Un informe analiza 114 entornos escolares de cinco provincias y los resultados son alarmantes: ninguno cumple las recomendaciones de la OMS. Solo una quincena de municipios de los 149 obligados a ello ha implantado su zona de bajas emisiones.
Universidad pública
Protestas contra el genocidio El consejero de Educación de Madrid pide sacar “la política” de la facultad de Políticas
La Comunidad de Madrid reacciona contra una declaración universitaria que exige al Santander, con quien la UCM mantiene un convenio, que deje de financiar proyectos contaminantes y a la industria armamentística corresponsable del genocidio en Gaza.
Genocidio
Genocidio Los Gobiernos europeos reprimen las muestras de apoyo a Palestina ante la inminente masacre de Rafah
Estados Unidos suspende por el momento la entrega de bombas a Israel ante la perspectiva del arrasamiento de Rafah. La UE organiza un seminario con el ministro de Exteriores y sus gobiernos reprimen las muestras de apoyo a Palestina.
Universidad pública
Acampadas propalestinas “Es nuestro deber señalar la complicidad de nuestras universidades con el genocidio”
Arrancan las acampadas universitarias en Madrid para exigir el fin de las relaciones con Israel y el apoyo a las víctimas del genocidio. Las acciones de protesta están ubicadas en Ciudad Universitaria, centro simbólico de la lucha universitaria.
Opinión
Opinión ¿Por qué lo hacen?
Los estudiantes que ocupan Bolonia y otros lugares no pueden detener el Holocausto. Pero pueden señalar que estamos del lado de los colonizados de todo el mundo y que desertamos de la guerra que los nuevos Hitler nos están imponiendo.
Palestina
Universidades Estudiantes de la Universidad de Alicante acampan para pedir el final del genocidio
Comienzan la acampada con una jornada en la que han realizado charlas, asambleas y un taller de pancartas en el campus de San Vicent del Raspeig.
Desempleo
Reforma Podemos apoyará el nuevo decreto de subsidio al no incluir el recorte en la cotización para mayores de 52 años
Este acuerdo desatasca la Componente 23 para la recepción de fondos Next Generation y fue tumbado el pasado enero en el Congreso con los votos en contra de Podemos, PP, UPN y Vox.
Elecciones
Elecciones Aliança Catalana: a las puertas del Parlament de Catalunya atizando la xenofobia y escondiendo la ‘estelada’
El partido liderado por Sílvia Orriols llega con una campaña mediática promovida por los principales medios españolistas del Estado, con el discurso antiinmigración como punta de lanza y con el deseo explícito de hacerse con parte del voto de Vox.

Últimas

Formación El Salto
Formación El Salto Fotoperiodismo y movimientos sociales: una mirada a las luchas desde abajo a través de un objetivo
La Escuela de Periodismo Crítico de El Salto ofrece su primer curso presencial, en el que abordaremos, de la mano de nuestros fotógrafos, cómo plasmar a través de la imagen movilizaciones y resistencias.
Crisis climática
Nuevo hito climático El pasado mes fue el abril más caluroso jamás registrado
Con una temperatura promedio del aire en la superficie de 15,03ºC, el pasado mes fue 0,67ºC más caluroso que el promedio de dicho mes entre los años 1991-2020 y 0,14ºC más que el anterior récord, el de abril de 2016.
Educación pública
Huelga de profesorado La Marea Verde vuelve a vaciar las aulas para tomar las calles de Madrid
Con un seguimiento que supera el 65% la primera jornada de huelga del profesorado madrileño transcurre entre piquetes y marchas por todos los puntos de la Comunidad de Madrid para exigir que se reviertan los recortes.
Sphera
Libertades civiles La secuela de un infiltrado
Los nuevos movimientos ecologistas llevan tiempo siendo objeto de vigilancia y criminalización por parte de los cuerpos de seguridad del estado y la judicatura.
Energía nuclear
Cerrar Almaraz Una primavera para empezar a cerrar Almaraz
Unas palabras para explicar la urgencia del necesario cierre de la contestada central nuclear de Almaraz y sus argumentos.
Ecología
¿RENOVABLES? La lucha contra los megaproyectos eólicos en Euskal Herria
Dicen querer luchar contra el cambio climático, pero el despliegue renovable no va acompañado por medidas reales para reducir el consumo fósil.
Aborto
"Mi voz, mi decisión" Madrid se llena de estatuas masculinas en favor del aborto
Una acción del colectivo Violetas(N) viste al famoso Oso y el Madroño o al exministro Alonso Martínez con el pañuelo verde en defensa del derecho al aborto, dentro de la campaña “Mi voz, mi decisión” para combatir el auge de la extrema derecha.
Palestina
Opinión Israel deja a la humanidad sin refugio
Otra vez Israel nos demuestra que puede hacer lo que quiera. Sus tentáculos de intereses económicos y sus sofisticadas bombas son capaces de asesinar a la justicia misma.

Recomendadas

Cómic
Julie Doucet “Cada cómic es un experimento, no me gusta ceñirme a categorías asignadas por otros”
Julie Doucet, icono del cómic alternativo y feminista de los años 90, publica ‘El río’, su nueva novela gráfica que constituye un hito editorial, dado que llevaba un cuarto de siglo alejada del medio.
Universidad pública
Protestas contra el genocidio El consejero de Educación de Madrid pide sacar “la política” de la facultad de Políticas
La Comunidad de Madrid reacciona contra una declaración universitaria que exige al Santander, con quien la UCM mantiene un convenio, que deje de financiar proyectos contaminantes y a la industria armamentística corresponsable del genocidio en Gaza.