Consumo
El feminismo está de moda

Mientras las pasarelas y los platós de televisión se llenan de modelos enarbolando banderas feministas y camisetas “revolucionarias”, las Naciones Unidas han alertado ya del impacto que la industria de la moda tiene en el medio ambiente y en las trabajadoras de los países empobrecidos.

Camiseta de Dior
26 jul 2018 07:30

Septiembre de 2016. Semana de la moda de París. Una modelo al borde de la anorexia sale a la pasarela llevando una falda de tul negra y una sencilla camiseta blanca con el eslogan de la escritora feminista Chimamanda Ngozi Adichie, "We should all be feminist", en la parte delantera. Forma parte de la colección de Dior, y solo la camiseta, cuesta 550 euros.


Todo el mundo se hacía eco de los "nuevos tiempos" que corrían para la liberación de la mujer en la moda, ejemplificado en la nueva directora de la firma, Maria Grazia Chiure, primera mujer en ocupar ese puesto en la famosa casa de modas. Al día de hoy, aunque la paridad esté de moda, solo un 17% de las empresas dedicadas a la ropa femenina están dirigidas por mujeres.


Cualquiera que entre en la red y ponga en el buscador las palabras "moda" y "feminismo" encontrará una gran cantidad de artículos con titulares del estilo "La hora de las pasarelas feministas", "la revolución feminista invade las pasarelas", "la moda también es ideología", etc., etc. Y es que la moda, además de imponer un modelo que obliga a la mujer a "estar a la última" y seguir los cánones de la báscula imperantes en ese momento, ha ido siempre pareja a los movimientos de liberación de la mujer: el fin del corsé, los bikinis, el pantalón de Coco Chanel, la minifalda o la invención del esmoquin femenino por Yves Saint Laurent.


No vamos a entrar ahora a debatir la cuestión de lo que es o no feminismo. Me parece más interesante subrayar que el impacto social y medioambiental de la industria de la moda no ha cambiado un ápice, con unas cifras de negocio que mueven, solo en España, casi 15.000 millones de euros (según cifras del INE de 2016). Los efectos medioambientales de la cultura de la "ropa rápida" son devastadores. La ONU llegó a calificar este año de "emergencia medioambiental" lo que está ocurriendo en este sector. Según la organización internacional, la industria de la moda es la segunda consumidora de agua en el mundo en sus procesos de fabricación, solo superada por la industria energética, y produce el 20% de las aguas residuales que se generan a escala global. Por poner un ejemplo, en la fabricación de una camiseta de algodón se utilizan 2700 litros de agua, la misma cantidad que una persona bebe durante dos años y medio. Además, el sector es responsable del 10% de las emisiones de dióxido de carbono que se lanzan a la atmósfera, más que las que producen todos los vuelos internacionales y el envío marítimo de mercancías juntos.


Un impacto brutal en el que también los consumidores somos responsables. Esta idea de “estar a la última” hace que, de media, el 40% de la ropa que compramos no se utilice nunca. Se compra mucha más ropa ahora que hace 20 años (un 60% más) y además se conserva la mitad de tiempo. El año ya no tiene cuatro estaciones, sino 52 micro-temporadas.


Un estudio reciente denuncia la contaminación que el uso de materiales tóxicos en la fabricación de textiles provoca en países productores como India o China. Allí, por ejemplo, los ríos cercanos a las plantas que fabrican viscosa en grandes cantidades están tan contaminados que se ha observado un aumento considerable de las muertes por cáncer en la población circundante.


La moda no cuida tampoco a las personas. La situación de semi esclavitud en la que trabajan las mujeres y los niños de miles de fábricas textiles de India y Bangladesh fue desgraciadamente conocida en todo el mundo tras el incendio ocurrido en el Rana Plaza hace cinco años. En él murieron más de mil personas, en su mayoría mujeres, y más de dos mil personas resultaron heridas. Aunque después de la catástrofe casi todas las empresas que compran el textil en estas fábricas se comprometieron a mejorar las condiciones laborales de sus trabajadoras, lo cierto es que el modelo de “ropa rápida” no da para muchos márgenes. Alguien tiene que pagar el precio.


Si como dicen, el feminismo está de moda, va a haber que estar muy atentas a todas sus consecuencias. No va a bastar con donar el dinero recaudado con la camiseta de Dior a la asociación de educación infantil creada por Rihanna. Bajarse de los tacones no sirve de nada si luego tenemos el armario lleno de zapatillas hechas por niños en algún país remoto. Todas deberíamos ser feministas, como dice Chimamanda, pero feministas conscientes del impacto que nuestro consumo tiene en el territorio y en las personas.

Archivado en: Feminismos Consumo
Sobre este blog
Saltamontes es un espacio ecofeminista para la difusión y el diálogo en torno al buen vivir. Que vivamos bien todas y todos y en cualquier lugar del mundo, se entiende. También es un espacio para reflexionar acerca de la naturaleza, sus límites y el modo en que nos relacionamos con nuestro entorno. Aquí encontrarás textos sobre economía, extractivismo, consumo, ciencia y hasta cine. Artículos sobre lugares desde donde se fortalece cada día el capitalismo, que son muchos, y sobre lugares desde donde se construyen alternativas, que cada vez son más. Queremos dialogar desde el ecofeminismo, porque pensamos que es necesario anteponer el cuidado de lo vivo a la lógica ecocida que nos coloniza cada día.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Consumismo
LECTURA 10 libros críticos con el modelo de consumo
Recopilamos diez libros que muestran una visión crítica del modelo y la sociedad de consumo.
Artes escénicas
Artes Escénicas ‘iSlave’: tecnología, esclavos y consumo
En ‘iSlave’, el compositor Alberto Bernal propone, junto a Mar Gómez y Pablo Ramos, reflexionar en el escenario sobre la esclavitud que la tecnología provoca en este sistema a un lado y otro de la pantalla.
#21160
29/7/2018 15:53

Pocas cosas mas ridiculas que el feminismo de pasarela y la esclavitud estupida de la moda, las marcas, las cremas y demas chorradas estupidas para sacaros el dinero.

1
0
Raúl Radovich
28/7/2018 16:57

No veo la relación entre feminismo y la semiesclavitud textil. El desastre de todo tipo que produce el consumismo no tiene nada que ver con el feminismo. Que los que controlen el negocio utilicen el feminismo no es responsabilidad del mismo, al igual que el Che Guevara no es responsable de los mil objetos que utilizaron su imagen. Por lo demás, la denuncia que hace el artículo es correcta. Pero por favor no contribuyamos a las campañas contra el feminismo que potencia el capitalismo patriarcal, aunque a veces se aproveche de su nombre.

1
2
#21140
28/7/2018 18:22

Habrá que definir diferencias claras entre el "feminismo" que adoptan las marcas de moda que incurren en estas contradicciones y el feminismo que no permitirá que se le represente en pasarelas pijas manchadas de sangre. No me parece que aclarar las cosas minusvalore el feminismo sino que le intenta quitar las partes que el capital le pone para hacerlo asimilable al sistema.

4
0
Luisma
29/7/2018 17:25

La relación es clara, la diferencia de clase/raza ligada al género, se habla de la liberación de la mujer, de que mujer? Se aprovechan del mensaje estético, del famoso purple washing, y no podemos olvidarnos del fetiche del propio mercado, si entendemos ese mensaje, que a su vez es positivo socialmente, lo llevaremos probablemente con un "inocente" orgullo, sin cuestionarnos que muy posiblemente esa camiseta la haya hecho una mujer en estado de esclavitud, por el mero hecho de que al ser mujer, es el único empleo al que tendrá acceso

3
0
Merin
28/7/2018 15:06

Me gusta el articulo

0
0
#21046
26/7/2018 17:40

Es notoria y eficaz la capacidad fagocitadora de movimientos sociales por parte del capitalismo más depredador.

Para evitarlo un poco, urge la importación masiva de las tiendas de segunda mano que triunfan hace décadas en los paises europeos más desarrollados.

La moda efímera de nuevos ricos que se ha instalado por aquí con Zara y compañia no deja de ser patética y chabacana además de insostenible para mantener habitable el planeta.

3
0
#21126
28/7/2018 14:35

"urge la importación masiva de las tiendas de segunda mano que triunfan hace décadas en los paises europeos más desarrollados"
Ropa usada: ¿caridad o negocio?:
https://www.hemerosectas.org/tvind-33/
El negocio de la ropa usada: materia prima gratis y beneficios astronómicos:
http://www.lasexta.com/programas/equipo-investigacion/noticias/negocio-%E2%80%98humana%E2%80%99-materia-prima-gratis-beneficios-astronomicos_201402215726b6f74beb28d446027522.html

0
0
#21176
29/7/2018 20:19

Las tiendas de segunda mano europeas como la del mercado de las pulgas de Paris existen desde el siglo XIX.
Otra cosa es que la globalización y el aumento descomunal de consumo de ropa nueva haya traido empresas-buitres que hacen negocios internacionales.
Pero la actividad a pequeña escala es loable, aunque lo mejor sería no renovar el vestuario todos los años.

0
0
#21128
28/7/2018 14:36

El verdadero precio de la ropa. La industria textil traza un perfecto relato de la globalización; el valor a lo largo de las cadenas de producción se aumenta a base de ignorar impactos ambientales y sufrimiento humano:
http://ctxt.es/es/20180502/Politica/19420/medioambiente-ropa-textil-Samuel-Martin-Sosa-Rodriguez-medioambiente-produccion.htm

0
0
Sobre este blog
Saltamontes es un espacio ecofeminista para la difusión y el diálogo en torno al buen vivir. Que vivamos bien todas y todos y en cualquier lugar del mundo, se entiende. También es un espacio para reflexionar acerca de la naturaleza, sus límites y el modo en que nos relacionamos con nuestro entorno. Aquí encontrarás textos sobre economía, extractivismo, consumo, ciencia y hasta cine. Artículos sobre lugares desde donde se fortalece cada día el capitalismo, que son muchos, y sobre lugares desde donde se construyen alternativas, que cada vez son más. Queremos dialogar desde el ecofeminismo, porque pensamos que es necesario anteponer el cuidado de lo vivo a la lógica ecocida que nos coloniza cada día.
Ver todas las entradas
Genocidio
Tribuna 18 noches en el lado correcto de la historia
VV.AA.
Entre infantilizaciones y denuncias de radicalización, desde la Acampada por Palestina de Madrid reclamamos con voz propia una ruptura de relaciones con Israel.
Desigualdad
Desigualdad Gary Stevenson: “Permitimos que el debate económico esté dominado por ricos y eso conduce a una idiocracia”
El londinense pasó de ser el 'trader' más rentable de uno de los mayores bancos del mundo a convertirse en un activista contra la desigualdad y contarlo todo en su primer libro.
Elecciones
Elecciones europeas La izquierda lleva sus cuentas pendientes a unas Europeas que ponen a prueba el contraataque de Sánchez
El Partido Popular y Vox plantearán una campaña en clave nacional contra el “sanchismo”. El presidente del Gobierno ha salido reforzado en las encuestas tras las elecciones catalanas pero no superará al PP según una reestimación de datos del CIS.
Extractivismo
Extractivismo Varela y su arena: una lucha por la supervivencia en Guinea Bissau
En una pequeña localidad de Guinea-Bissau, un grupo chino, apoyado por actores senegaleses y el propio Estado guineano, planea explotar los recursos minerales y la arena de la región.
Medio ambiente
Estreno 'Altri: a sede insostible’, un documental sobre los futuros efectos de la celulosa proyectada en A Ulloa
Este viernes 24 de mayo, El Salto y Xarda estrenan un proyecto audiovisual sobre cómo una multinacional portuguesa pretende destruir recursos naturales y sociales en el corazón de Galicia con la creación de una pastera diez veces más grande que ENCE.
Contigo empezó todo
El Salto libros El Salto lanza su propia línea editorial con un libro sobre la otra historia de España
El Salto Libros se estrena con el volumen ‘Contigo empezó todo’, del periodista Eduardo Pérez, otra visión de la historia de España a través de 30 episodios olvidados. Suscríbete y te lo enviamos gratis.

Últimas

Palestina
William Schabas “Vemos cómo el derecho internacional puede usarse a favor de los estados del Sur Global”
Este abogado analiza la trascendencia de la solicitud de órdenes de detención contra Netanyahu y Gallant tomada por el Tribunal Penal Internacional en el marco del genocidio llevado a cabo por Israel en Palestina.
Extrema derecha
Opinión “La alianza global de los patriotas” y el oxímoron “anarcocapitalista”
Tanto la extrema derecha de Milei como la de Abascal pueden confluir en que la ‘libertad’ sea reducida sólo al privilegio de acumular, en un ‘fascismo de mercado’.
Genocidio
Genocidio La Corte Internacional de Justicia ordena a Israel detener la ofensiva de Rafah de manera inmediata
El Tribunal de la ONU da un nuevo aviso al Gobierno de Netanyahu y le ordena detener la ofensiva de Rafah ante la constatación de que sus anteriores órdenes no han sido cumplidas.
Barcelona
Espacio público El Parque de Louis Vuitton y el vecindario fuera del Güell
Cientos de vecinos se manifestaron contra la privatización que el Ayuntamiento de Jaume Collboni ha hecho del parque público más emblemático de Barcelona para acoger un desfile de la marca de lujo francesa que patrocina la Copa América de vela.
Arte
Arte El arte visual de Mahmoud Alhaj ilustra la huella de la violencia de Israel en Palestina
El artista Mahmoud Alhaj expone en Barcelona su proyecto ‘Violence 24/7’, una alegoría visual sobre los efectos que la ocupación israelí tiene en los sujetos, la conciencia y la geografía palestina.
Más noticias
Palestina
Palestina Cientos de estudiantes toman la Universidad Humboldt de Berlín en apoyo a Gaza
La ocupación de la institución, renombrada “Instituto Jabalia” en honor al campo de refugiados de Gaza, termina con el desalojo de la policía 30 horas después.
Explotación laboral
Derechos laborales Condenan a Marina Beach por despedir a una trabajadora que se quejó por whatsapp
La trabajadora pidió por el grupo de chat de la empresa que cubrieran las necesidades básicas de material que tenían los empleados y fue despedida.
Minería
Mineras contra el territorio La minera que provocó un conflicto en Groenlandia irrumpe con proyectos en Castilla y León y Extremadura
La polémica compañia australiana ETM, protagonista del convulso proyecto de Kvanefjeld (Groenlandia), tras los planes extractivistas de Villasrubias y El Payo (Castilla y León ) y Salvaleón, en la extremeña Sierra de Gata.

Recomendadas

Sanidad pública
Conciliación en entredicho Enfermeras denuncian que hospitales madrileños están bloqueando reducciones de jornada
De cara al próximo verano grandes hospitales de la Comunidad de Madrid están impidiendo que las profesionales del sector de la enfermería acumulen horas para poder librar días enteros, derecho adquirido que va en retroceso.
Fake news
Investigación Así se financia la desinformación en Murcia: ‘OkDiario’ y ‘EsDiario’, los favoritos de López Miras
El Gobierno murciano ha repartido más de 240.000 euros a medios de desinformación en los dos últimos años. De ellos, Eduardo Inda se ha embolsado casi la mitad y EsDiario 54.355 euros.